Para Human Rights Watch “designar a la Hermandad Musulmana como una organización terrorista extranjera la equipararía erróneamente con grupos extremistas violentos como Al-Qaeda y el Estado Islámico y haría ilegales sus actividades” porque “… la Hermandad Musulmana en Egipto renunció oficialmente a la violencia en la década de 1970 y trató de promover sus ideas a través de actividades sociales y políticas”. Sin embargo, el fundador de la Hermandad Musulmana, Hassan Al-Banna hizo de la violencia yihadista un punto focal de su movimiento. Él escribió: “La muerte es arte” y “Combatir a los incrédulos implica todos los esfuerzos posibles que son necesarios para desmantelar el poder de los enemigos del Islam”.
Fuente: http://www.cciu.org.uy/