En un discurso ante las Naciones Unidas el 20 de septiembre de 2017, presumiblemente como una forma de apoyar su afirmación de que Israel es un “régimen deshonesto y racista que pisotea los derechos más básicos de los palestinos“, el presidente iraní Hassan Rouhani retrató repetidamente a su gobierno como dedicado a la “moderación y respeto por los derechos humanos”, agregando: “En Irán nos esforzamos por construir la paz y promover los derechos humanos de los pueblos y las naciones. Nunca toleramos la tiranía y siempre defendemos a los que no tienen voz. Nunca amenazamos a nadie Solo hay que mirar a los cristianos de Irán, que forman el 1% de toda su población, para probar estas afirmaciones. A diferencia de la persecución que otras minorías cristianas experimentan en las naciones de mayoría musulmana, que a menudo está en manos de individuos, turbas o terroristas profesionales musulmanes, el principal impulsor de la persecución cristiana en Irán es el propio gobierno.
Fuente: http://www.cciu.org.uy/