Las sonrisas rompen el solemne hielo propio del histórico momento. Como si temiera un arrepentimiento de última hora de sus ilustres invitados, el presidente estadounidense Jimmy Carter blinda y prolonga el saludo de los líderes de dos enemigos agotados por 31 años de guerras y amenazas. El presidente egipcio, Anwar Sadat y el primer ministro israelí, Menajem Beguin, parecen aliviados porque saben que la negociación estuvo al borde del fracaso y nerviosos porque entienden que la firma no garantiza la paz. La primera que rubrica un país árabe con el Estado judío.
Fuente: http://www.cciu.org.uy/
Cuarenta años de paz fría entre Egipto e Israel