La realidad de la vida diaria en Israel, sin olvidar sus tensiones y problemas, halla a sus habitantes todos, de distintas religiones y culturas, a pesar de todo, compartiendo muchos aspectos de la vida. Uno de los escenarios más claros de esa convivencia, es en los hospitales por todo el país, donde ver a judíos, árabes y cristianos trabajando o atendiéndose, es lo más común. Recientemente, conocimos a uno muy singular, el Saint Louis, un hospital que es también monasterio. Probablemente, nos dice su Directora Monika Dullman, el único monasterio del mundo donde hay fijo un rabino y comida kasher, o sea de acuerdo al rito judío.

Fuente: http://www.cciu.org.uy/

Con Monika Dullman, monja y enfermera, Directora del Hospital Saint Louis de Jerusalem

Deja una respuesta