Por Lic. Rafael Winter (Rufo)*, para CCIU
“Veni cuánto antes de esta inmundicia…” Parte del mensaje de Silvia Amodio, mamá de Jayson Granger. Suena muy fuerte pero… Aunque el flagelo del racismo en el deporte se ha extendido desde hace tiempo en muchos países del mundo, no es ningún consuelo que pase también aquí, donde también se viene extendiendo.
Y en ese sentido lo que golpea en estos momentos al deporte uruguayo en general, al basketball en particular, es el “caso Jayson Granger”.
En el contexto de las finales de Basketball entre Aguada y Peñarol, el jugador de Peñarol Granger fue objeto de insultos racistas por parte de un jugador de Aguada. Tan repudiables como haberle dicho “sos mío, mono”…
Granger reaccionó luego de la segunda final, comprensible pero desmedidamente y pasó de víctima a victimario.
Posteriormente pidió disculpas.
El viernes pasado en el estadio de Aguada tuvo lugar la cuarta final
Mientras Granger realizaba el calentamiento previo, buena parte de la hinchada rival gritaba “Negro cag…”.
No eran tres o cuatro que vociferaban (igual estaría mal) era buena parte de la hinchada…
A raíz de estos hechos, Jayson Granger publicó un comunicado.
En el mismo decía, entre otros conceptos, que ” ya había sido objeto de racismo y odio desde que llegó al basketball uruguayo”…
Muy triste.
La mamá de Granger, comprensiblemente, le escribió desde el extranjero exhortándolo.
“Veni cuanto antes de esta inmundicia…”
Pase lo que pase en la órbita legal -si es que algo pasa- el daño moral ya esta hecho.
Todo esto, si bien no es nuevo, demuestra cada vez más un mayor deterioro en nuestra sociedad.
Este es un tema grave en el cual deben tomar cartas en el asunto (algunos ya lo están haciendo) varios: en primer lugar el club implicado por hinchada y jugador; la Federación Uruguaya de Basketball; Ministerios; y hasta el Gobierno nacional.
También quienes se ocupan del tema del racismo en el Uruguay: la Comisión Honoraria contra el Racismo y la Institución Nacional de Derechos Humanos.
Cada día hay más discriminación en el Uruguay. Y no solamente por este caso.
Este no es un “asunto” solamente inherente a la comunidad afro más allá de si reaccionó o no.
Como judíos también nos debe de preocupar.
Y a toda la sociedad.
Estos actos de racismo no deben naturalizarse ni darse por obvios.Hay que condenarlos y sancionarlos.
Le ha ocurrido en varias ocasiones al club Hebraica y Macabi, objeto de agravios antisemitas.
Lo que de ninguna manera se debe dejar pasar.
Nada que sea racista se debe dejar pasar y debemos ser sensibles ante los agravios racistas contra quien sea.
Estos hechos dañan a la persona en cuestión -en este caso a Granger- y a su familia.
Pero también dañan a la sociedad toda y a la imagen de nuestro país.
(*) El Lic. Rafael Winter fue integrante de la Comisión Honoraria contra el Racismo, la Xenofobia y toda otra forma de Discriminación.
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Fuente: http://www.cciu.org.uy/